Como defender casas y apartamentos

La defensa debe empezar por su propia casa, su hogar. Su primer deber y obligación reside en la protección de sus seres queridos. He aquí para ello, una regla de oro: La defensa debe considerarse como un todo. Estúdiela en sus múltiples aspectos y no deje nada al azar o al olvido. Para ello ningún principio le será tan útil como este: Si quiere saber qué riesgos corre su hogar y qué zonas de peligro contiene, piense como el ladrón, póngase en su sitio, en su pellejo, sitúese en su perspectiva, y pregúntese entonces qué haría si tuviera que penetrar en la vivienda y hurtar objetos de valor.

Ese ejercicio mental le pondrá en la pista, supuesto que lo realice con lógica, para descubrir las zonas vulnerables de su casa. Ya sabe, entonces, cuál ha de ser su comportamiento: robustecer con tino los tales puntos vulnerables. Si por un momento vacilara usted en la adopción de semejantes medidas, si pensara que era demasiado molestia, entonces nos limitaríamos a recordarle, en sustancia, el peligro que corremos hoy en día todos los mexicanos viviendo en un país de delincuencia.

Proteger puertas y ventanas del propio hogar constituye ni más ni menos que el ABC de cualquier defensa racional. El primer paso a dar. Ahora bien ¿Cuáles son las prioridades del peligro? ¿Qué puntos resultan ser los predilectos del ladrón o atracador?

No hace falta subrayar la importancia de tener puertas y ventanas bien defendidas. Con un comentario marginal: a la vez, no descuide usted su atención a lugares como el sótano ni al cierre de las puertas del balcón, pues estos son consecuencia de alrededor de una décima parte de casos que el malhechor se sirve de tales puntos vulnerables para penetrar su casa. No se olvide, pues, de cerrar ambos siempre, y en particular de noche, antes de acostarse.

Para la vigilancia de puertas y ventanas nos tropezamos, en principio, con un serio obstáculo: que la inmensa mayoría de ellas están fabricadas con materiales de frágil resistencia a base de madera sintética, chapa, o maderas muy delgadas que ceden ante un buen puntapié. Por si fuera poco las bisagras son en extremo endebles y para remate de desdichas, en los cerrojos se echa mano de sistemas estandarizados; sin contar que paneles y marcos se ofrecen no menos débiles, con arreglo a una construcción barata e irresponsable. En suma, una coquetona invitación al robo. ¿Qué más podía apetecer el ladrón?

Por esta razón si se quiere una seguridad plena, es importante custodiar su vivienda tomando en cuenta cuales son los tres enemigos de un ladrón:

1.El tiempo: Si al cabo de 3-5 minutos no ha logrado penetrar la casa, surge el desaliento y el delincuente prefiere abandonar.
2.El ruido: El ruido de personas, radio o televisión así como sistemas de alarma son una invitación para huir.
3.Dispositivos de Seguridad: La existencia de mecanismos de seguridad tornan dificil y peligrosa su acción, y prefiere elegir a otra víctima.
No olvide las medidas de seguridad que no pueden faltar en casa, sobre todo si queremos seguridad. Si nuestra situación lo amerita, la mejor opción es un equipo de seguridad privada que todo el tiempo este en custodia de nuestra seguridad. Por último una última advertencia: La seguridad lo es todo, ya que si arriesgamos a los que más queremos lo demás no importa.

Cortesia de Seguridad Privada y custodias CONSEG

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.